Harto de políticos y de partidos. No hay proyectos entre nuestros representantes, sólo descalificaciones, improperios e insultos. Tú más que yo, yo menos que tú. Partidos con estructuras decimonónicas y sindicatos perdidos en la noche de los tiempos. No hay responsabilidad entre los políticos e incluso se amparan en la inmunidad parlamentaria para colocarse un escalón más alto del resto de los mortales. Tenemos Camps, EREs, lista de la vergüenza en la Junta de Andalucía, financiación irregular de partidos, Carlos Fabra, privatizaciones por doquier en Madrid, alcaldes que no asumen su responsabilidad política en desfalcos... Aquí no se salva nadie.
Políticos que se subieron a un "coche oficial" con una veintena de años y aún no se han bajado: Fraga Iribarne, Alfonso Guerra, Diego Valderas...
Sistemas electorales caducos: Listas cerradas, ley D´Hont, políticos que se presentan una y otra vez sin ningún reglamento que les impida hacerlo más de dos veces.
Cinco millones de parados, mientras pensionistas y funcionarios se convierten en la diana de los recortes presupuestarios.
Vergonzosas actitudes políticas que convierten a diputados, senadores, presidentes de comunidades autónomas, consejeros, presidentes de diputaciones, alcaldes y concejales, en una casta profesional al margen de la crisis y de cualquier renovación estructural del Estado.
Medios de comunicación casados con el poder y críticos con todo lo que pueda tambalear su estatus social.
Políticos que se subieron a un "coche oficial" con una veintena de años y aún no se han bajado: Fraga Iribarne, Alfonso Guerra, Diego Valderas...
Sistemas electorales caducos: Listas cerradas, ley D´Hont, políticos que se presentan una y otra vez sin ningún reglamento que les impida hacerlo más de dos veces.
Cinco millones de parados, mientras pensionistas y funcionarios se convierten en la diana de los recortes presupuestarios.
Vergonzosas actitudes políticas que convierten a diputados, senadores, presidentes de comunidades autónomas, consejeros, presidentes de diputaciones, alcaldes y concejales, en una casta profesional al margen de la crisis y de cualquier renovación estructural del Estado.
Medios de comunicación casados con el poder y críticos con todo lo que pueda tambalear su estatus social.
Una banca usurera, sin darle movilidad a los mercados y después de haber recibido todos los parabienes económicos de este gobierno seudosocialista.
Una Iglesia más preocupada por los bienes terrestres que por nuestras almas. Una iglesia que participa en pleno siglo XXI, el siglo de la razón, en nuestras declaraciones de hacienda con su miserable y vergonzosa casillita.
En fin, tiempo de revoluciones. Revoluciones ideológicas, científicas, políticas y sociales. Yo me apunto y, por supuesto, me voy ya mismo para Cádiz y poder participar en ellas.
Una Iglesia más preocupada por los bienes terrestres que por nuestras almas. Una iglesia que participa en pleno siglo XXI, el siglo de la razón, en nuestras declaraciones de hacienda con su miserable y vergonzosa casillita.
En fin, tiempo de revoluciones. Revoluciones ideológicas, científicas, políticas y sociales. Yo me apunto y, por supuesto, me voy ya mismo para Cádiz y poder participar en ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Ecos en La Isla