Seguidores

jueves, 8 de septiembre de 2011

La Isla de Babel


Sólo yo, sin auxilio de cualquier otro mortal. Sólo yo construyendo aquella inmensa torre levantada en el centro de La Isla Misteriosa.

Dinteles, arcos, contrafuertes, cúpulas, metopas, arquivoltas y pechinas. Planos y cartas representando gráficamente el sueño de una osadía.

Seiscientos sesenta pies de alto edificados sobre el nivel del mar.

Cirros, cúmulos y estratos acompañándome en la agotadora empresa de superar tu creación en aquellos primeros renglones del Génesis.

Todo resulta tan extraño aquí arriba. Silbidos de sirenas, susurros de eunucos y alientos de ánimas en mi nuca. Tu silencio me embarga... ... ...and bana bildirin de dunkel szándékok kde la colère gudomliga emaitza semper maailmanlopun. Amén.

3 comentarios:

  1. Fernando de Pessoa decía, "Si escribo lo que siento es porque así disminuyo la fiebre de sentir". Isla, enhorabuena por el post.

    ResponderEliminar
  2. Nada impedirá que llevemos a cabo nuestra empresa como un solo pueblo....
    ¿O sí?... No puede ser... ¿Han conseguido dispersarnos?


    Gran post!

    ResponderEliminar

Ecos en La Isla